Me surgen dudas cuando leo todas esas tendencias del e-learning… y no sé si son dudas razonables o dudas irracionales.
Me voy a intentar explicar, aún sabiendo que quizá alguien piense que soy un derrotista o incluso algo peor.
Tendencia 1
Parece que lo más de lo más es el Blockchain, a pesar que la inmensa mayoría de mortales no tenemos ni idea de qué es ni en qué consiste… sólo he visto algo basado en blockchain (TUTELLUS) y diría que no ha sido fácil implementarlo y que el trabajo que hay por detrás debe ser descomunal.
Estoy convencido, por lo poco que he leído y he entendido, que muchas de las cositas que hoy hacemos con internet van a ir por ese camino, pero también estoy convencido que una aplicación genérica en el sector e-learning va a tardar unos cuantos años como para que sea una realidad palpable.
Tendencia 2
Otra tendencia es la IA… pero si eso se resume en hacer una app con reconocimiento facial, como he leído en un blog especializado, es para echarse a reír… La IA debe ir ligada al bigdata y a los contenidos… y en eso, los chicos de Netex parecen ser de los mejores, al menos, la visión que están dando de learningcloud es muy apetecible.
Tendencia 3
Incluso se habla de los contenidos 3D como tendencia… esto ya es de apaga y vámonos… ¡el 3D hace como 20 años que existe! y si no se ha implementado más en el mundo del e-learning, básicamente, es por un motivo: es caro y su producción es costosa en el tiempo… pero, y aquí sí que hablo por experiencia propia, introducir un video en 3D en un curso puede aportar si con él haces algo más, sino, poco aporta. Un vídeo, en 3D o en 2D o en 1D o en 0D si no está pensado, editado y diseñado para aportar conocimiento en un curso, sólo sirve para verlo y escucharlo… y si es muy chulo para pensar “¡uoooohhh!”
Otras que casi son una realidad
Lo que sí que me parece como asumible y tildable como tendencia son los chatbots (en algunos casos), el big data, que me parece esencial y el microlearning, que creo que es lo que más se acerca a una realidad palpable y cuya máxima expresión, y perdonad que sea poco objetivo, Snackson me parece una de las soluciones más ideales.
Hablar de tendencias, en general, hace que quien las escribe parezca un gurú del sector, pero a veces también puede parecer que quien las escribe es un trol (sin acritud). Algo de eso escribí hace unos meses aquí.
¡Pero si aún escucho quiero un SCORM responsive para mi explorer 8!
Para mí, la gran tendencia sería abandonar la gestión formativa del e-learning como se hace actualmente en la mayoría de casos: bajo SCORM y bajo el paradigma de “clase”. El aprendizaje es mucho más que un aprobado/incompleto.
Al final, en el e-learning corporativo, que es el que conozco, la tendencia que marca al resto de tendencias, es la económica. Sin presupuesto no hay tendencia, con suerte hay creatividad y una lucha descomunal por parte del diseñador instruccional y los programadores para hacer un producto relevante, eficiente y eficaz para tu cliente.
No es prudente hablar de ciertas cosas cuando la realidad te enseña que ni algo tan factible como el mobile learning está implementado en la mayoría de organizaciones (aún escuchamos “es que deben utilizar el móvil personal”, como si no lo utilizaran para enviarse mensajitos en cadenas de whatsapp en horario laboral), o si la gamificación (la de verdad) no es factible porque muchas de las LMS no están preparadas para tratarla… en esto, los chicos de Inserver son, simplemente los mejores.
Tanto hablar de la “competencia” y… ¿qué hacemos en Designtrainig? Nosotros intentamos seguir con lo nuestro, que es ser eficaces, eficientes, intentando dar los menos problemas y avanzar con paso firme, no seremos los más grandes pero somos nosotros y eso no nos lo quita ninguna tendencia. Intentamos aportar nuestras soluciones aprendiendo de los demás e intentando aportar algo que no sea trendy pero sea factible, creativo y que cumpla con el objetivo principal del e-learning: aprender.
A veces, sólo a veces, pienso que al vendedor de tendencias le da igual vender tendencias que vender humo…
En fin, alegrémonos el día que La Casa Azul ha vuelto!