Para nosotros, el año empezó con cierta alegría.
En enero entregamos un proyecto multisco en 16 idiomas. Un proyecto que nos llevó más de 4 meses producirlo y que nos permitió dar un primer paso hacia una nueva proyección en nuestros cursos, una gamificación suave y asíncrona de los materiales. A esto lo empezamos a llamar ludificación de contenidos.
Ese mismo mes de enero iniciamos la conceptualización de un nuevo producto, #elearningshow. Un nuevo concepto pedagógico que pretende agrupar todos los elementos gamificados que hemos creado y vamos a crear para que nuestros clientes los puedan aprovechar cuando conceptualizamos sus proyectos.
Febrero nos sirvió para avanzar en ese nuevo producto. Generalmente, para nosotros, febrero es el mes más flojo en cuanto a trabajo. Nos podríamos ir de vacaciones 20 días y nadie nos echaría de menos ;-). Ya se escuchaba algo referente a una “cosa rara” que pasaba en China.
Marzo… COVID-19, Estado de Alarma, teletrabajo en las organizaciones, histeria colectiva, confinamiento…. Ahí cambió todo, en lo profesional y personal para muchos. El COVID-19 ha cambiado dramáticamente nuestro mundo.
Por suerte para nosotros, lo del teletrabajo es intrínseco y no nos afectó ni en lo personal. Todos estuvimos y estamos bien. Durante este mes de marzo, nos empezamos a plantear muchas cosas:
- ¿Qué tenemos que hacer?
- ¿Cómo podemos ayudar a nuestros clientes?
- ¿Cómo debemos acompañar a nuestros clientes?
A finales de ese mes publicamos este artículo: COVID-19 y el e-learning corporativo acompañado de una canción de #thebeatles versionada por Pamploamoose: Something
Y llegó abril y con él la locura… Sin previo aviso, todo el mundo se hizo experto en e-learning, todo el mundo sabía cómo preparar contenidos formativos online en un par de días, todo eran urgencias y todo era importante.
Para nosotros fue un shock. ¿Cómo hacer entender en ese momento de histeria que la formación requiere de un proceso y un modelo pedagógico y crear contenidos formativos requiere de un tiempo y cuesta un dinero? Tras un mes de absoluto desbordamiento, tuvimos un momento para reflexionar y surgió esto: Aprendizaje post COVID-19. De lo presencial al e-learning. En este artículo intentamos compartir los elementos que hacen que un producto formativo online sea un excelente producto formativo.
Para nosotros fue un punto de inflexión y decidimos forzar la máquina con #elearningshow.
Durante los meses de mayo (por primera vez en 15 años facturamos 0 euros un mes de mayo), junio y julio trabajamos a tope en todos los proyectos que nos llegaron, sin renunciar a la calidad y a los tempos que requieren nuestros proyectos. A lo único que renunciamos, tras hablarlo todo el equipo, fue a una parte de nuestro beneficio: todos los proyectos que nos encargaron durante esos meses tuvieron un 20% de descuento. Era nuestra manera de ayudar a las empresas a seguir adelante en la formación online. Fue durante esos meses cuando lanzamos el primer curso gamificado, cuando cerramos proyectos diferenciales dando valor al modelo pedagógico y no a la urgencia del momento (es una suerte tener clientes que entienden de #elearning).
También es cierto que durante esos meses producimos cantidades ingentes de lo que nosotros llamamos #slowlearning, que básicamente, y por resumirlo, son pequeños microcursos desarrollados en Rise que no requieren de una gran complejidad ni en el diseño instruccional ni en el gráfico ni en el tecnológico y que funcionan bajo la siguiente premisa: “es un proyecto urgentísimo y no tengo demasiado presupuesto o necesito iniciarme en esto del e-learning”. A pesar de esta premisa, nuestro #slowlearning tiene ciertas condiciones que los hacen distintos:
- Amamos a freepick.
- Durante 3 meses no tuvimos fines de semanas para poder dedicarles más tiempo en cuanto a la conceptualización y en cuanto a la producción.
Y en agosto trabajacionamos 😉 Nos fuimos de vacaciones, como siempre, y seguimos trabajando en distintos proyectos, algunos de ellos con clientes nuevos e importantes. Porque, como ya sabéis, en Designtraining somos fieles seguidores del “trabaja cuándo quieras y dónde quieras”. Así que, aunque este año no pudimos coger nuestros aviones para viajar a esos lugares lejanos de los que somos tan asiduos, seguimos con la misma filosofía.
Sin más, nos plantamos en septiembre y las conversaciones que habíamos tenido con algunos clientes tomaron forma. Cerramos 8 aventuras gráficas gamificadas, un proyecto espectacular sobre Sexual Violence en niños y adolescentes, un nuevo programa basado en nuestro primer producto cerrado de #elearningshow, varios proyectos de cursos con gamificación asíncrona, la creación de un programa sobre skills básicas y un autodiagnóstico gamificado y la incorporación de productos e-learning para una nueva plataforma de aprendizaje online: la Cruyff football platform a Possessionfootball.
En octubre entregamos un proyecto sobre Mindfulness a una organización con más de 15.000 trabajadores… y sí, encontramos la calma suficiente para el último sprint… un sprint que está a punto de acabar.
Noviembre fue un mes de trabajo, de conversaciones interesantes, muy interesantes con algunos clientes para enfocar nuevos proyectos de cara a 2021, porque hay que seguir avanzando. También empezamos a producir un programa formativo para el sector Salud, que por cierto, se merecen todos los recursos y todo nuestro reconocimiento.
Y diciembre ha sido un mes de entregas de proyectos, todos los que cerramos durante el mes de septiembre y de resolver alguna urgencia para algunos de nuestros clientes.
Dejadnos pedir disculpas por este post tan largo, pero creemos que es bueno que sepáis que a pesar de, con perdón, la mierda de año que ha sido 2020, nosotros seguimos siendo optimistas y no vamos a renunciar a seguir creando productos formativos con la máxima calidad de la que seamos capaces.
Creemos en el #elearning, creemos en la capacidad de nuestros clientes para seguir avanzando en diferentes metodologías online, estamos convencidos que nos espera un futuro esperanzador y no queremos renunciar a seguir haciendo lo que nos hace felices y a seguir creando nuevas herramientas y productos.
La vida es una aventura, sigue adelante y afronta los retos.
Dicho esto, desearos lo mejor a todos. Y afrontemos la vida como Pau (DEP)