A día de hoy, aún me sigo planteando si la necesidad del #metaverso es real o si simplemente es una necesidad creada e impuesta por unas mentes perversas que solo quieren ganar más dinero y seguir en la cresta de lo ola (si en esta frase léeis Zuckerberg, vais por buen camino).
Que ahora vuelvan, como 20 años después, con el rollo de Second Life y lo vistan de inmersivo, moderno y necesario para que los seres humanos no desaparezcamos de la faz de la tierra me tiene descompuesto y orbitando constantemente, porque yo no tengo demasiadas ganas ni de morir ni de pasearme por mundos ficticios.
Y de golpe, como quien no quiere la cosa, entre tanto orbitar, aparece Jack Pearson, sí, el tipo de #ThisisUs, sentado junto al Dr. K que le está aconsejando en el que, seguramente, es uno de los momentos más importantes de su vida: “No hay limón tan agrio que no permita hacer algo parecido a la limonada”.
Y yo, entre lágrima y lágrima, que me apunto la frase con una nota: “¿hablará del metaverso?”
Leí a Edward Castronova, uno de los mayores especialistas en mundos sintéticos, que existen tres características fundamentales de los metaversos y, que si lo miras fríamente, son las mismas características que se dan en #ThisisUs:
1. INTERACTIVIDAD
El usuario es capaz de comunicarse con el resto de usuarios y de interactuar con el metaverso. Esto implica que sus comportamientos pueden ejercer una influencia sobre los objetos y sobre los comportamientos y opiniones de otros usuarios, influencia que también puede ser recíproca.
En el metamundo de #ThisisUs, Jack es como el Dungeon Master de una partida de Dragones y Mazmorras… un auténtico pesado que utiliza su trono en el mundo de los recuerdos para interactuar y ejercer una influencia sobre todo y sobre todos.
Da igual que sea su mujer o sus hijos o sus nietos (que no lo conocen), en cualquier momento de cualquiera de los episodios, aparecerá con una frase del tipo “Te amo todo lo que un corazón humano puede amar”… y claro, ahí se desatan todas las influencias y todas las consecuencias, tanto en la pantalla como en el sofá. Y, por supuesto, el lagrimal se irrita y kleenex sube en la bolsa.
2. CORPOREIDAD
Los usuarios están representados por avatares y están limitados por una altura y un peso considerables. La corporeidad consiste en la presencia de ese avatar sobre ese espacio que también posee ciertos límites, ya que está sometido a ciertas leyes y tiene recursos limitados.
El metamundo de #ThisiUs, la corporeidad es Jack. Sí, siempre Jack. El hombre perfecto, delicado, sentimental, poderoso en el amor y en la reflexión… siempre, siempre, siempre está Jack, como una mosca cojonera pero sin serlo.
Y es en esa corporeidad donde te das cuenta de como la interactividad y la influencia en ese mundo en el que él no vive está hecho a su imagen y semejanza cuando escuchas a Randall, el pobre Randall, el incomprendido Randall, como es capaz de parafrasear a Jack: “La vida se siente como Pac-Man a veces, supongo. Es el mismo juego de nuevo. La misma tabla. Mismos fantasmas a veces, obtienes un montón de cerezas, pero eventualmente e inevitablemente esos fantasmas te alcanzan”.
Es ahí donde de nuevo, porque es una constante, como el 3D en el metaverso, que el lagrimal vuelve a irritarse como si todas las agujas del mundo apuntaran hacia él.
3. PERSISTENCIA
Esto significa que el programa sigue funcionando y desarrollándose a pesar de que algunos o todos sus miembros no estén conectados. Además, las posiciones en las que se encontraban los usuarios al cerrar sus sesiones, así como sus conversaciones, objetos de propiedad, etc., siempre son guardados, lo que permite recuperarlos cuando nos volvamos a conectar.
En el metamundo de #ThisisUs, la persistencia, como bien imaginas es Jack. Rebecca también tiene un peso importante, se esfuerza, se supera a pesar de los muchos pesares, de todos los pesares imaginables e inimaginables (excepto en la mente del creador de la serie), pero no es nadie sin Jack.
Ninguno de ellos es nadie sin Jack y sus frases platónicas: “Todas sus vidas tendrán triunfos y caídas, pero que la vida es así, a veces estás abajo, pero siempre hay forma de volver a subir”.
A ver, ante semejantes sentencias, se entiende que en metamundo de #ThisisUs es Jack y solo Jack.
Los Pearson son unos simples avatares cuyas vidas se manejan desde una realidad no vivida y manejada por alguien que no está físicamente, pero que condiciona el pasar del tiempo. Vamos, que el tiempo en ese metamundo, solo pasa si Jack quiere.
La pregunta que me corroe la mente es: ¿Para qué quiero un metaverso si, This is Us, consigue todo lo que pretende ese pseudomundo y lo hace tan creíble que, tras verla, solo piensas en el malvado ser que creó semejantes guiones para que tú, sentado en un cómodo sofá, te plantees que quieres ser Jack Pearson pero con un pelín más de suerte?
