No, no seré yo quien te cante una canción de Navidad, pero me parece interesante, ahora que ya estamos tocando la Navidad y el final de año, hacer una pequeña reflexión sobre el 2013, un año que para Designtraining era importante y, posiblemente, marcará un punto de inflexión, y esto lo digo con un optimismo moderado y sin querer ser pedante. Si nos has seguido, sabrás que este año hemos hecho una apuesta, en la medida de nuestras posibilidades, muy importante para intentar innovar y adaptarnos el máximo posible al nuevo e-learning que poco a poco va viniendo y que nuestros clientes piden. Sabrás que a principios de año apostamos para dar el salto a HTML5 mediante Articulate Storyline. También sabrás que cambiamos las máquinas para poder trabajar mejor y que intentamos mejorar uno de nuestros puntos débiles, la corrección ortotipogràfica (esto es el resultado de preguntar por nuestros errores a nuestros clientes, asumirlos y buscar soluciones). También decidimos cambiar la web para intentar transmitir lo que realmente somos y para diferenciarnos de nuestra competencia. Dentro de este entorno, decidimos potenciar el blog con reflexiones un poco “sui generis” sobre nuestro trabajo y nuestro sector. Otra decisión que tomamos fue intentar mantener los precios de nuestros productos, intentando ser justos, a pesar de que el nuevo formato es un nido de ventajas por nuestros clientes (como la visualización desde cualquier dispositivo móvil de los cursos), pero nuestra filosofía es que ellos estén contentos y nosotros también.
Pues bien, el resultado de todas estas apuestas es que sí, ¡que acertamos! Y estamos felices porque el feedback también ha sido muy positivo por parte de los clientes. Hemos conseguido con mucho de esfuerzo incrementar nuestra producción en un porcentaje muy elevado. Hemos podido dar servicios que hasta ahora no podíamos… cursos en multiidioma, y esto ha significado hacer cursos en tailandés, ruso, checo, inglés, francés, finlandés… y a una velocidad destacada y, algo que nos encanta, hemos podido ofrecer la grabación y edición de vídeos a precios muy competentes.
Pero para conseguir esto, hemos tenido que cambiar muchas cosas en nuestra dinámica y nuestra sistemática de trabajo. La conceptualización de los contenidos ya no es la misma, ahora contemplamos muchas más acciones interactivas, jugamos más con las imágenes y buscamos que el alumno obtenga feedbacks rápidos, originales y curiosos. Esto quiere decir que las horas que dedicamos a pensar son más de las que dedicamos a programar. Y es gracias a haber estudiado las posibilidades del nuevo software.
También hemos conseguido crear una red de colaboradores más estable para mantener una filosofía que no queremos abandonar. Nosotros somos pequeños, pero con nuestros colaboradores, podemos ser muy grandes, ¡tanto como quieras! Queremos mantener nuestra filosofía de trabajar en red con otros freelance y, allá donde no llegamos, contar con alianzas con otras empresas más potentes. Porque sabemos quién somos, qué somos y hasta dónde podemos llegar en cada momento.
Y mira, como que casi es Navidad, te dejo una pequeña canción que siempre me ha hecho reflexionar: