La evolución lógica de los procesos de aprendizaje pasa, inevitablemente, por la tecnología y, pasa sí o sí, por encontrar soluciones metodológicas relacionadas con Internet.
El sistema “tradicional” de la formación online da síntomas de agotamiento. Desde la aparición de Internet, se siguen “sirviendo” contenidos con el mismo formato conceptual. Sí que han evolucionado las herramientas de producción de contenidos, pero la visión pedagógica sigue siendo la misma, un intento de trasladar al online lo que hemos hecho siempre en el presencial.
Cuesta cambiar la mentalidad, y me pongo el primero de la lista. Todos los que nos dedicamos al elearning hemos evolucionado y todos, o eso quiero pensar, intentamos aportar procesos metodológicos creativos, que si videos interactivos, que si árboles de decisiones, que si storytellings adaptados al sistema online, que si gamificación (esto ya lo decía Pestalozzi en el año 1800) pero siempre acabas pensando que falta algo… que la evolución lógica del aprendizaje basado en la tecnología actual debe dar un paso más, aunque sea un paso arriesgado.
Está claro que adaptarse a la velocidad de la innovación tecnológica es sumamente complicado, pero debemos acercarnos. Y acercarse a ello si hablamos de aprendizaje, y más si es un aprendizaje dirigido a los empleados de grandes organizaciones, pasa, sí o sí y sin ninguna excusa, por progresar teniendo en cuenta las tendencias e interacciones de los seres humanos con la tecnología, es decir, por el móvil.
Y pasar por el móvil no quiere decir hacer cursos multidispositivos, que también y que son necesarios, quiere decir ir mucho más allá. Quiere decir pensar como interactuamos con él y como debería ser su uso en el aprendizaje continuo.
Creo que, lo ideal, es no abandonar las metodologías actuales, que ciertamente tienen éxito (llevo 15 años en esto del elearning y creo que no lo estamos haciendo mal del todo), sino crear una nueva forma de aprendizaje que sea el nexo de unión entre todas las metodologías y que nos acompañe en la evolución lógica del aprendizaje.
Y eso se consigue, como ya escribí hace unos días, esforzándonos en el análisis de la interacción pedagógica. Los contenidos son la clave para esta evolución y si no somos capaces de adaptarlos a la usabilidad del móvil no seremos capaces de aportar las soluciones que nos merecemos como seres en constante aprendizaje. Sin unos contenidos pensados y diseñados para aprender con y desde esta herramienta seguiremos conformándonos con lo de siempre, que es bueno, muy bueno, pero quizá no sea lo ideal.
Nuestra apuesta es estrujar nuestra mente para crear una metodología que se convierta en algo natural, en algo tan sencillo como enviar un whatsapp, en algo tan lógico como fraccionar el aprendizaje en pequeñas porciones de aprendizaje que te permitan aprender en cualquier momento y en cualquier lugar (que tenga cobertura, claro).
La evolución lógica sería apostar por complementar el modelo actual dando un paso más, es decir, confiar en las personas y en el uso que hacen de algo tan imprescindible como es móvil, sin ser intrusivos. No se trata de crear videojuegos en 3D con realidad virtual, no se trata de eso. Se trata de ser lógicos con nuestras costumbres y saber adaptar el aprendizaje a nuestra manera de vivir.
Y como muestra un botón. Ayer me decía un amigo: “Jordi, a mi lo que me gustaría es que por la mañana, cuando entre en el coche, éste me diga: Hola, hoy vamos a aprender algo más sobre…. Y que mientras voy a menos de 30 km/h mi coche me ayude a aprender, porque cuando llego al trabajo, es difícil encontrar 1 hora al día para realizar la formación”. Por ahí pasa el futuro, pero antes de llegar a él, tenemos que darle forma al presente. Y el presente, muy pronto, va a pasar por los microcontenidos… y en breve, tendrá nombre.
Si quieres saber ese nombre, no dejes de visitar nuestro blog… en poco tiempo, te lo daremos a conocer.